Hábitats naturales.
En el medio natural, las grietas que quedan entre las piedras son normalmente ocupadas por varias especies de reptiles y pequeños invertebrados que ocupan estos lugares como refugio. De modo que, en nuestras huertas o jardines si no se dispone de un murete o una rocalla natural, se debe imitar a la naturaleza con la construcción de estructuras de rocas alineadas y ordenadas a modo de pequeños muretes formando pequeños bancales o apiladas a imitación de estructuras naturales como las rocallas.
Al ejecutar los muros, se debe tener en cuenta, que deben tener espacios libres interiores donde los reptiles y los pequeños invertebrados puedan permanecer ocultos. Para ello hay que evitar el uso abusivo de cemento y utilizar morteros de barro y arena para sujetar las piedras que dan forma al muro. Se recomienda el uso de rocas basálticas, poco trabajadas, lo más oscuras posible para garantizar el aislamiento térmico, así como poner atención a la orientación para que este algo soleado.
Al ejecutar las rocallas, se debe tener en cuenta, que deben ser construidas con piedras naturales sin usar ningún tipo de argamasa, siendo colocadas de forma que se respete la posición natural de la roca, dejando grietas entre unas y otras donde en ocasiones depositaremos tierra fértil para plantar pequeñas plantas rupícolas, que mejorarán la estética de la unidad, el resto se completará con plantas autóctonas, aromáticas y rústicas para mimetizarse con el entorno y que favorezcan la polinización.
También
podemos acomodar a diferentes
especies de invertebrados, anfibios, o
reptiles
así
como
pequeños mamíferos,
con algunos ladrillos perforados, tiestos
cerámicos viejos
y
con otros materiales que tengamos a mano, reciclando y sirviendo para
que las
especies más pequeñas tengan
refugios seguros, en
otros
huecos
tendrías que meter hojarasca en el fondo para
favorecer
que organismos descomponedores como cochinillas y otros insectos se
sientan a gusto,
a la
vez que
serán
alimento de pequeños vertebrados, por
otra parte, esta
materia vegetal en descomposición será
un sustrato perfecto para la nidificación de diferentes
tipos de reptiles, ya
comenté en otro artículo como hacer compostaje
casero.
De esta manera, ante la constante destrucción, degradación y contaminación de los ambientes naturales en el ámbito rural, nuestras huertas y jardines están destinadas a convertirse, cada vez más, en pequeños refugios y hábitats de la fauna y flora útil y beneficiosa para nuestros cultivos, ya que se facilita la polinización y el control de plagas de una forma natural, esto es también válido para las plazas y las parcelas ubicadas en el ámbito urbano, también en los parques, de hecho, los grandes parques disponen de estos recursos incluso de producción melífera.
Por lo tanto, la observación y el estudio de la fauna y la flora autóctona en el entorno de nuestras huertas y jardines, de forma constante y regular durante todo el año, es de vital importancia para la conservación y el equilibrio de los ecosistemas locales, y favorecer con ello la biodiversidad.
Ramón Gijón, educador ambiental.