Jardín
de Ayora.
I.- Cronología histórica.
El jardín histórico es de final
del siglo XIX, tiene un estilo ecléctico. El jardín presenta
árboles centenarios y de gran tamaño que obsequian innumerables
sombras, está fragmentado por numerosos macizos y arriates que
permiten caminos sinuosos plazuelas triangulares, redondas,
ejecutadas con tierra y bordeados con rodeno, por lo que consigue un
ambiente fresco con un aura misteriosa a descubrir.
El Jardín se extiende hacia el
sur de la edificación y está dividido en tres secciones mediante
muros y rejas de alambre. La primera circunda al palacete y presenta
árboles originarios, la segunda forma un espacio rectangular donde
han sido instalados juegos infantiles y también subsisten árboles
originarios, como plátanos, falsas acacias, naranjos, limoneros… y
cubriendo los muros, una magnifica hiedra, la tercera parte, la más
amplia, es rica en especies vegetales y se extiende formando un
amplísimo rectángulo cerrado por altas tapias de obra mixta de
mampostería careada y ladrillo. En sus cuatro caras han sido
abiertos accesos independientes que se cierran con puertas de hierro
forjado. En la parte central se encuentran dos amplias glorietas, una
de las cuales está provista de bancos de obra recubiertos con
cerámica vidriada, al lado está situada la rosaleda engarzada en
pérgolas metálicas, y muy cerca se encuentra el macizo de viejos
magnolios. Al fondo, también se sitúa una placeta irregular donde
se encuentra una fuente pública de principios de siglo en hierro
fundido con una columna de capitel jónico, cuyo fuste decora un
escudo de la ciudad.
Este Jardín se caracteriza por
la extremada variedad de especies vegetales con numerosos ejemplares,
autóctonos y exóticos que le da cierto carácter de jardín
botánico, entre las numerosas especies de árboles y plantas que se
pueden contemplar destacan, acacias y falsas acacias, eucaliptos,
pinos canadienses, palmeras, jacarandas, aligustres chinos,
cinamomos, grevilleas, limoneros, naranjos, magnolios, ficus,
laureles, tuyas, pitas, canas, hibiscos, adelfas,alteas, mimosas,
bambúes, esparragueras, buganvillas, matas de margaritas, rosales,
cactus, etc.
Hace unos años, parte del
entorno del Jardín de Ayora histórico se ajardinó, ampliando
considerablemente su superficie, dotando a los vecinos de nuevos
servicios junto al metro. El nuevo parque vecinal complementa al
antiguo Jardín de Ayora, aportando aquellos espacios propios de un
parque público actual, una gran plaza e instalaciones deportivas,
por él se accede al vestíbulo principal de la estación de metro
del mismo nombre.
El conjunto cercado presenta
partes originales y la zona de jardín más alejada de la casa es la
que mejor conserva la vegetación original, sin embargo la zona más
cercana solamente conserva algunos de los árboles originales, como
las palmeras que flanquean el camino de acceso al palacete. La línea
5 de metro se prolonga hacia el puerto-playa proporcionando una
parada intermedia en el Jardín de Ayora, la propia estación
propicia una ampliación de zona verde junto al jardín histórico
situada al este del mismo, se completa así los usos de jardín
histórico con otros propios de un parque más actual, dotado de
juegos infantiles y áreas para el deporte.
El elemento vertebrador del
parque es el paseo central que enlaza las calles Justo y Pastor y
Jerónimo de Monsoriú buscando un efecto de variedad y de cierre de
perspectivas, a uno y otro lado de este paseo se van creando
diferentes espacios, los jardines de acceso a la estación semi
enterrada, la pérgola longitudinal lateralizada sobre el paseo
central, otro espacio ajardinado entre el paseo y el jardín
histórico, la piscina cubierta, una pista deportiva al aire libre y
una gran pradera en el borde este a rediseñar tras la ejecución de
un aparcamiento subterráneo.
También se establece un nuevo
vallado en el cerramiento este del jardín histórico para crear una
permeabilidad entre ambos espacios ajardinados sin vulnerar el
carácter cerrado del Jardín de Ayora que conserva el protagonismo. La pérgola de madera con estructura metálica del paseo enmarca las
vistas al jardín histórico y permite disfrutar de la sombra que
aporta. El paseo se asoma a modo de balcón al espacio de acceso a la
estación, es un espacio pavimentado de carácter polivalente,
bordeado por jardines en suave talud y constituye un excelente
mirador sobre el jardín de Ayora. En esta ampliación se sitúan
árboles y especies vegetales tales como, palmeras, plátanos,
naranjos amargos, jacarandas o tipuanas.
II.- La arquitectura.
En el jardín histórico de Ayora
se presenta un palacete que fue construido a finales del siglo
XIX,entre 1889-1990. tiene un marcado carácter modernista, con
mezcla de estilo clasicista y con una combinación de diversos
materiales en sus muros, que le dan mucho colorido.Se sitúa en el
barrio de Algirós, entre las calles Santo Justo y Pastor, Jerónimo
Monsoriu, Conserva y Plaza Organista Cabo.
En sus orígenes fue levantado
como una villa de recreo en la zona suburbana de la ciudad, aunque en
la actualidad está totalmente integrado en ella. Se trataba de un
Palacio de descanso realizado para por el comerciante José Ayora
según proyecto de Pelegrín Mustieles, que se asienta sobre elevado
en la zona norte del jardín, obteniendo una terraza en altura que se
cierra con una balaustrada y que rodea al edificio, el desnivel se
salva mediante una escalinata en la fachada principal que da acceso
al palacio. Se trata de un edificio cuadrangular compuesto de planta
baja, planta noble y ático bajo la cubierta, con una torre cuadrada
en la parte central de esquinas achaflanadas que en cada uno de sus
lados abren dos arcos de medio punto, la cubierta es a cuatro aguas y
presenta una cúpula que adopta forma bulbosa con teja dorada.
Las fachadas presentan los vanos
encuadrados presentando varios modelos según la categoría de
puertas o ventanas, de esta forma nos encontramos con puertas
recercadas y rematadas mediante frontones ornamentados, arcos
adintelados, rebajados o geminados de medio punto, los huecos que se
disponen en el ático bajo cubierta son rectangulares apaisados entre
paños cerámicos con motivos geométricos. Las fachadas combinan
bicromía con pilastras de piedra natural y paños de ladrillo rojo,
los huecos están recercados también con piedra natural.
Destacan la fachada principal y
la trasera por su remate de frontón curvo, en la fachada principal
alberga la imagen de mercurio bajo la que aparece la fecha de
realización del edificio. Los huecos de la planta noble de estas dos
fachadas presentan un antepecho abalaustrado, mientras que en las
fachadas laterales únicamente está la central.
Estuvo a punto de ser demolido en
1983, y al ser declarado monumento artístico se rehabilitó, en los
ochenta el edificio es destinado a Guardería Infantil y Sección de
Policía Municipal. Se conserva la claraboya central de hierro y
vidrio en diversos colores con algunas pinturas decorativas, la
escalera está realizada con mármol y madera.
Fuente:
jardinesvalencia.es,
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